sábado, 28 de abril de 2012

Tristeza

Unos días me como el mundo y otros siento que soy devorada.
Porque hoy es uno de esos días, uno de esos días de tormenta en que noche y día se mezclan hasta llegar a tal punto en que son uno,  donde ni la música puede aplacar la tristeza que siento en mi interior, un lunes, miércoles o jueves, da igual, no tiene pauta ,llega, se convierte en lágrimas, dudas... y luego se marcha como la tormenta una vez calmada, no deja rastro alguno de su presencia en el cielo. En esos momentos, me siento una extraña en mi propia casa, un fantasma entre la gente, siento rabia porque nadie se da cuenta de que estoy llorando, creo que ni yo misma lo noto... hasta que las lágrimas desbordan mis ojos.
Porque no lloras solo con los ojos sino antes lo hizo el alma.

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